miércoles, junio 28, 2006

Is Pain


Que dolor, que dolor; dentro del armario...

Dioses, creía haber superado esa etapa. Pues bien, hasta aquí hemos llegado. Maldini, Maradona, Montes, los de la Plaza del Sol, de Colón... Todos. Ajo y agua. Que cosas, tanto hablar de cuartos de final y resulta que en las dos últimas competiciones de seleccionones internacionales, ni de octavos pasamos. Bah. Que les den. De este Mundial son más las reflexiones políticas y metasexuales extraíbles que cualquier paja mental futbolística, donde sería necesario encerrar bajo llave toda teoría que mezclase Raúles titulares, suplentes, negros de mierda y sexadores de pollo japoneses. Esto solo nos pasa aquí. Es España, Spain: Is Pain.
En la china Maoísta había un departamento censor especializado en el área deportiva. Dado que cualquier participación olímpica oriental era siempre tratada con absoluto recelo por el C.O.I, fuese comunista o no, desde fuera se echaban los balones a la piscina alegando injustas medidas arbitrarias por parte de la organización. Y todo para justificar fracasos deportivos que a la inmensa mayoría de los ciudadanos chinos no les imprtaba ni un tercio del aprecio que guardaban a su balneario favorito o a su bicicleta de turno. Pero como ya he dicho, eran externas todas aquellas críticas y excusas baratas. Desde dentro, el régimen se ocupaba de maquillar la moral deportiva del país con mentiras varias, o manipulaciones sutiles y en ocasiones hasta subliminales de los resultados finales. Pero eso, claro, no podría pasar aquí. En España acabamos el partido con tan poco orgullo como nos sobraba el día previo, así que es fácil pasar del ramplón titular: "Jugones" ; a la derrotista bandera de: "Otra vez igual". Y no es de extrañar. Nuestro periodismo siempre ha vagado confuso, atufando dislexia y avaricia (de esa que rompe sacos pero nunca saca$). Es lógico no obstante, publicitar hasta la náusea un acontecimiento que te ha costado noventa kilos de royalties y quién sabe si algún órgano (cuasi) vital. En España todo se vende porque todo está en venta, y todo duele porque todo cuesta. Es España. Spain. Is Pain.

"Tiempo, anticipas mis terribles designios: el fugaz propósito nunca será alcanzado mientras la acción no lo acompañe."

Jugando al gato y al ratón con la memoria, podríamos olvidar el desastre de Alemania tomando las cartas de lo blasfemo. La testosterona en este mundial ha sido para nuestro equipo un estorbo del que pocas veces se ha abusado. Ahí queda la casta marica de los pipiolos más alegres, trastornando la felicidad precoz de su juego (Cesc, for example) en lagrimones tiroleses de diseño al finalizar el encuentro de Francia. Luego se abrazaban, se consolaban, y se daban palmaditas en las nalgas. Este tipo de detalles, dignidad aparte, sería conveniente esquivarlos para evitar el chiste fácil de las magas nacionales del humor celulítico: Eva Hache, Llum Barrera and company. Si no hablan de las piernas de Cristian Ronaldo o de la tableta de chocolte de Casillas, coquetean sin gracia con la confusión sexual de una escuadra. Sería terrible que Alemania 06 pasara a la posteridad con el epitafio feminista que cualquiera de estas humoristas sin gracia pudiera grabar en nuestra memoria colectiva a base de gestos grotescos y muecas insoportables. Nos aprovechéis de nuestra debilidad, malas zorras.
Otra gracia que el destino podría jugarnos sería la idealización perversa que la masa mayor, despojada de ilusiones, dibujase de su prensa. Podría decirse que el exploit can(s)ino que de nuestro tiqui-taca se hizo con fiereza, fue el definitivo detonante de la hostia final en octavos. Tanto picar a Zidane, tanta jubilación, tanto Maradona y tanto gol (a balón parado), han reventado el pus de esta selección tan joven y llena de genio como inexperta y ansiosa. Maldito Manu Carreño, me las pagarás. Gente como tú, Manolo Lama, Matías, Montes o Maldini; son impensables en otro país. En cualquiera que no goze con el dolor. En cualquiera que no fuera España, Spain. Is Pain.

Respetemos eternamente el vicio y no combatamos sino la virtud.

Sin embargo, no creo que saquemos una sola conclusión de este mundial que supere en patriótico y optimista a lo poético de su música. De la nuestra, digo. Nada de Il Divo, ni Opá. Hablo del himno y su letra. Esa que es (era) coreada con pasión por todos lo aficionados. La que no existe, la ectoplásmica. La que es a su vez cantada como nino-nino por un espectador del fondo norte, como chunda-chunda por el de tribuna, y como chan-chan-chan por un señor de Murcia (¡tírate a la Pataki!). I love this game.

4 :

Anonymous Anónimo Excretó esto...

Pero hombre, cómo puede considerar poético a un himno de circunstancias. Una marcha militar convertida en estandarte porque "algo había que poner".

No creo que hay más de tres o cuatro himnos nacionales que merezca ser considerados como tales. Y la marsellesa sería uno de ellos.

Yo no me siento representado por esa música, ni por esa bandera, ni por esos jugadores vestidos de rojo. Ellos son profesionales que se juegan su dinero con cada patada arreada al balón (véase Togo, per example), lejos quedan los tiempos de la selección alemana del 54, que jugó gratis por falta de algo con qué gratificarles. Claro, que tampoco ellos pidieron nada a cambio de lo que consiguieron.

Imagino que escribió esto bajo la influencia de la decepción.

Espero que esa decepción no le impida prodigarse más a la hora de postear... Aunque no esté de acuerdo con casi nada de lo que diga, tiene usted uno de los pocos blogs que merecen la pena hojear.

miércoles, 05 julio, 2006  
Anonymous Anónimo Excretó esto...

Gracias por la confianza y la comprensión; ni mi familia ni esos malditos 8 de cada 10 doctores fueron tan magnánimos en su diagnóstico.

lunes, 17 julio, 2006  
Anonymous Anónimo Excretó esto...

Hace poco lei algo en el periódico que hablaba de ese estúpido símbolo que tenemos y nos "representa" a los españoles que es el toro.
En este algo comentaba la deplorable situación de los toros a la hora de salir a la plaza de arena cuando salen drogados, mareados y ya maltratados de antemano para se humillados y posteriormente asesinados por "cultura y diversión".
Este toro, puesto sobre la bandera de España ¿Representa la humillación y el maltrato del animal haciendo referencia al país, o la bravura y nobleza de la que tanto hablan y la cual le roba un hombre de ridículas vestimentas y escasas neuronas?
Este es el típico animal español, el que (n)os representa...por eso quizás lo maltraten tanto.

martes, 18 julio, 2006  
Anonymous Anónimo Excretó esto...

Atentamente, Mariquita Pérez.

martes, 18 julio, 2006  

Publicar un comentario

<< Home

free web stats
.