domingo, noviembre 05, 2006

Al infierno

Que lo maten. Bien duro. Que su cuello se retuerza inquieto entre la áspera fibrosidad de una cuerda tensada con el enérgico músculo de un verdugo eficaz. Sería una pena que se rompiese en el impacto de la caída. Más que una pena sería una desgracia, vamos, lo que faltaba; ya que lo matan (tarde) que lo maten bien. Que intente aguantar estoicamente la ejecución, endureciendo la robustez impetuosa de su gaznate, esquivando el fallecimiento súbito. Que, poco a poco, se de cuenta de que todo está perdido, que ya no puede más, que… ahhh. Todo se esfuma: la fuerza, el orgullo, la dignidad… y lo más importante, aquello que no era discutible dada su abrumadora obviedad, la vida. El aire no se acaba, se aglutina impertinente entre mandíbula desencajada y sus fosas velludas. Y de repente, explota. Bum. Ha muerto.

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Miren, a mi la pena de muerte no me importa un carajo, pero como si tal, ¿capichi? Sí, es una verdadera lástima que el ser humano pague su incapacidad comunicativa y, en definitiva, humana, con la venganza cínica de la doble moneda; pero amigos, es lo que hay. Si hubo Troyas y Vietnams, habrá Iraks, o sea que no vengamos ahora pidiendo cuentas. Salgan ordenadamente a la calle a protestar por las injusticias, la doble moral, los yankees go home y el Pepe Blanco for president. Pero no me toquen los huevos si finalmente no derramo lágrimas por el cretino de Sadam. Soy el primero en ejercer de progre babuíno de chaqueta de pana y cigarrito con más ceniza que filtro entre los labios, pero todo tiene un límite.
Yo era muy joven cuando Carrero saltó, pero tenía la suficiente conciencia de mi entorno como para entender que el atentado no traería nada malo a mi país. Era, a fin de cuentas, el señor que heredaría la tiranía de un régimen que parecía renquear por los cuatro costados y parte del quinto. Así que a ver quien era el guapo que hablaba de derechos humanos, democracia (¿?), tolerancia, blabla. Pero oigan, que no era el único que esbozó una sonrisilla cuando se enteró; la masa pubescente de gérmenes comunistoides que se iba desarrollando con timidez por la periferia de Madrid (ya no digamos Barcelona) brindaba con todo aquello que burbujeara por el asesinato del presidente del gobierno. Y tan contentos. Soy consciente de que no son ni mucho menos comparables en el aspecto táctico las situaciones de Husein y Carrero Blanco, vale, entendido. Entra en escena la invasión de Irak, supongo, ilícita, ilegal, y todas esas chorradas que lejos de ser ciertas o no, a mi me la soplan por intrascendentes en lo que al caso refiere. Estoy personalizando, queridos, porque es lo único que a un outsider como yo le queda tras años de apatía no contenida. Vivo anárquicamente, fuera de normas o tejemanejes estúpidos que cohíban mi autonomía, y desde luego no atiendo a los reproches de cuatro tuercebotas enfurruñados con muchas buenas maneras que demostrar. Así pues, cuando miro s Sadam no veo ni a Bush padre ni a Bush hijo; ni la primera guerra del Golfo ni la segunda. Solo percibo el despotismo de un indeseable hijo de puta al que no me importaría lo más mínimo ver agonizar entre dos cuerdas anudadas para la ocasión.



No vengan a mi casa para que rubrique ningún manuscrito en pro de la pena de muerte, amigos, ni siquiera una recogida de firmas a favor de la ejecución de cualquiera de estos cabrones que hay sueltos por el mundo. No pienso dar mi brazo ni me alma por ningún movimiento político o social, joder, aún conservo unas migajas de dignidad entre mis huesos. Les cerré la puerta en las napias a esos verdes que lloraban por la lapidación de esa mujer nigeriana a la que iban a lapidar por ser infiel a su señor marido, así que ya ven lo firmes que mantengo mis principios. Y ni un remordimiento, oiga. Otra cosa es que, como quien dice, se despierte o apague una lucecita en mi interior ante una noticia X o Y. "La vieja que se colaba en la cola del banco la ha palmado, ¿sabes?" Pues de puta madre, coño, que quieres que te diga. Ya iba siendo hora, ¿no? Y con los asquerosos por los cuales la UE interviene en nombre de la democracia y el progresismo, tres cuartos de lo mismo. Que les jodan. Y yo, ay, virgencita de los blogs, que me quede como estoy.

17 :

Anonymous Anónimo Excretó esto...

Pero que facha eres, 6dedos. Eres un facha y voyas al PP, seguro. Estás a favor de la pena de muerte, ¿no? ¿Es eso o no es eso lo que pretendías decir entre tanta palabra culta y aires de bizarrín guay? ¿Eh?

¿Prefieres dominicanas o rumanas?

domingo, 05 noviembre, 2006  
Anonymous Anónimo Excretó esto...

Estoy en desacuerdo con el texto porque Seisdedos ¿de verdad piensas eso de Sadam? Tu concepción de la vida me da hasta pena. Sadam es lo mejor que nos ha dado la vida y lo digo de verdad.

domingo, 05 noviembre, 2006  
Anonymous Anónimo Excretó esto...

Vamos, que además me parece penoso todo esto

domingo, 05 noviembre, 2006  
Anonymous Anónimo Excretó esto...

Tíos, quería pediros perdón por todas las molestias que os he podido causar. La verdad es que no sé qué me pasó...

Yo y mis amigos somos gente sencilla, además tengo internet desde hace solo dos años y no me manejo aún muy bien en este medio.

Todo ha sido culpa de Rubén Latower y mi amigo de correrías que me pinchaban todo el rato por el messenger.

Bueno, que eso, que me gustaría ser vuestro amigo otra vez.

Perdón.

lunes, 06 noviembre, 2006  
Anonymous Anónimo Excretó esto...

Esto es un cocido y no es madrileño. 6dedosgordosdelpie es un fascista antes conocido como comunista pero que se declara anarquista. Y eso que dice que el anarquismo como sistema político es ridículo. Hay que joderse con el facha.

lunes, 06 noviembre, 2006  
Anonymous Anónimo Excretó esto...

Pues a mi juicio Sadam no hizo tantas malvedades; es más, creo que el propio 6dedosgordosdelpie tiene un pasado delictivo de mayor embergadura al del irakí.

¡Cuántos kurdos guardas en el armario?

lunes, 06 noviembre, 2006  
Anonymous Anónimo Excretó esto...

Me imagino que escribes en tono irónico. Si no es así me gustaría que presenciases una ejecución, yo lo he hecho en un país africano, y sinceramete amigo no creo que pienses de la misma forma.

Permíteme que me esconda tras un anónimo para no parecer una pedante.

lunes, 06 noviembre, 2006  
Anonymous Anónimo Excretó esto...

Le ejecuten o no, todas las atrocidades que cometió quedarán ahí.

La pena de muerte me parece despreciable. Sin peros. Tan despreciable como los jueces que condenan a tres años de cárcel a un tipo que apuñalan a su esposa 70 veces... ya que no hubo ensañamiento. Hecho real, por cierto.

Personalmente preferiría que los criminales de este calado viviesen para ser conscientes de cómo su cuerpo se pudre año tras año, tras unos barrotes. Porque el odio, el rencor y el dolor generados por éstos, nunca podrá ser reparado.


Cuídese, Sr. Seisdedos.

martes, 07 noviembre, 2006  
Blogger Camilo de Ory Excretó esto...

Pues a mí Sadam me cae simpático.

Es mi opinión.

martes, 07 noviembre, 2006  
Anonymous Anónimo Excretó esto...

Cuantas infamias, insultos y desvergüenza vertida sobre mí. Me corroe la ira al comprobar la fácil que es difamar... Estoy asqueado y cabreado, a punto de reventar; pero... ¿cómo no voy a estarlo cuando se insinúa que HE LLORADO VIENDO "SALVADOR"?

Vaya truño de película, no cuenta nada. Se queda en un torrente de imágenes que bien podrían ser de archivo, aburriendo con una voz en off soporífera e impertinente. Peli para progres baratos, no me gustó, no señor.
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A SEÑORA le hablo:
He tenido el placer (cultural, claro) de ver el horror con mis ojitos. Lo he contado ya en alguna ocasión, no quisiera que tildasen de tedioso mi discurso, pero es algo que nace por autonoimasia y en cinta desde que a alguno se le ocurrió llamarme pedante a los seis años, así que poco importa ya.
He trabajado en conflictos bélicos, cámara o bolígrafo en mano, y he tenido la oportunidad de ver tiroteos, cuerpos en descomposición, niños con metralletas, e incluso una mina mutilar a un amigo al que tengo aprecio. Mi periplo duró lo suficiente como para darme cuenta de lo que era o no bonito, feo, justo o injusto, de honor o cojones. Así que no me venga a mí con los africanitos homófagos bailando el rito del blanco decapitado.

Y aclarado esto, decir que no fueron más de cinco meses, no tengo la catadura moral como para considerarme hijo de las bombas. Que pena.
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Alex:
La pena de muerte es una cosa muy fea, sí, no lo niego ni priorizo un caso sobre otro. Simplemente, no hablo de política, sino de sentimientos. Es que soy de letras.

martes, 07 noviembre, 2006  
Anonymous Anónimo Excretó esto...

Hostia, me olvidaba de Camilo.

Sadam puede ser cualquier cosa menos simpático. Es un rata, ratanuí. Fidel es simpático, hasta Franco deb´´ia tener sus momentos; así como Gadaffi, Mussolini, y algún privilegiado más. Pero Sadam es un borde, coño.

A ti te va la marcha.

Atentamente, dedos.

martes, 07 noviembre, 2006  
Anonymous Anónimo Excretó esto...

Qué suerte tiene... Con el máximo respeto que sabe le guardo a usted y a su pedantería, le diré que habiendo crecido en una bella barriada del sur de Madrid trufada de tiroteos, violencia (doméstica también), muertos con o sin jeringuilla incrustada en sus brazos, palizas sin motivo y mucho, mucho miedo y asco sin Las Vegas, a día de hoy sigo sin saber qué es bueno, malo, correcto o moral. Pues no fueron los muchos cabrones que poblaban y pueblan aquel agujero quienes minaron la salud de mis padres (con su alma no pudieron), sino los cabrones encorbatados que permiten sobrevivir a quienes les sirven, cual esclavos, a cambio de un miserable sueldo que apenas alcanza para cubrir necesidades mínimas.

¿Para cuándo un videojuego que aniquile a los hijos del ladrillo y el pelotazo? Cuestión de adrenalina y odio.

Y cambiando de tema... ¿Para cuándo uno de sus amables posteos que tanto hecho de menos? Le cedo algunas sugerencias a su estéril imaginación: Pepe Viyuela, Máximo Pradera, Florentino Pérez...

Cuídese.

jueves, 09 noviembre, 2006  
Anonymous Anónimo Excretó esto...

Oído cocina, pero Viyuela no da la talla. Me seduce la idea de Pradera...

jueves, 09 noviembre, 2006  
Blogger Virrey Mendoza Excretó esto...

Quizá Goyo González? Sugiriendo by the way.

viernes, 10 noviembre, 2006  
Anonymous Anónimo Excretó esto...

Joder, Chimp... ¿tú quieres que me salgan sarpullidos y malsanas enfermedades mientras escribo ese hipotético artículo?

Y ya que lo mencionas...¿de dónde salió ese infecto personaje? ¿Era compañero de droguerías del tal Agustín o qué?

viernes, 10 noviembre, 2006  
Anonymous Anónimo Excretó esto...

¿Y en qué guerras dices que has estado, dedos?

viernes, 10 noviembre, 2006  
Anonymous Anónimo Excretó esto...

Hombre, está claro que eso fue una burda invención mía.

viernes, 10 noviembre, 2006  

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